¿Qué es el virus del papiloma humano?

Existen más de 200 tipos de virus del papiloma humano. Sí, 200. Pero solo 40 afectan a los genitales, contagiándose durante el contacto directo de piel a piel al tener sexo con una persona portadora. Más concretamente, cuando tus genitales entran en contacto con la boca, garganta o genitales de esa persona³. Dentro de estos 40 VPH de transmisión sexual, podemos diferenciar dos tipos: los de bajo riesgo y los de alto riesgo.

• VPH de bajo riesgo: puede causar verrugas alrededor de los genitales, el ano, la boca o la garganta. En el caso de las mujeres, puede que estas verrugas aparezcan en lugares difíciles de notar como el cuello del útero y la vagina_⁴. Su riesgo es moderado y la infección suele desaparecer por sí sola.
• VPH de alto riesgo: su riesgo es mayor, ya que se le relaciona con determinados tipos de cáncer. Esto es debido a que el VPH genera una serie de cambios celulares que, con el paso del tiempo, pueden transformarse en distintos tipos de cáncer⁵. En este tipo de papilomas no se presentan síntomas, por lo que es muy importante realizarse pruebas ginecológicas de forma regular para asegurarnos de que todo está bien.

Ante esto, y sabiendo que el VPH es algo muy común, seguro que te preguntas:

 ¿Se puede prevenir? 

Sentimos decirte que evitarlo al 100% es muy complicado, pero sí que es posible reducir el riesgo de contraerlo o propagarlo.  Una de las medidas es el uso de preservativos y barreras de látex bucales⁶. Otra es la vacuna, ya que administrada antes de que la niña o mujer se exponga al virus, previene la mayoría de casos de cáncer de cuello de útero, vagina y vulva. Además, previene las verrugas genitales, los cánceres anales, de boca, garganta, cabeza y cuello en mujeres y hombres⁷. Aunque es recomendable vacunarse antes de empezar la vida sexual, para ciertas franjas de edad puede ser recomendable hacerlo una vez iniciada. Deberás consultar con tu médico si te recomienda la aplicación de la vacuna ya que, aunque ya presentes una cepa, con la vacuna puedes protegerte de otra si aún no la tienes⁸. 

¿Se puede tratar?

Y ahora que ya hemos hablado de cómo intentar prevenirlo, hablemos del tratamiento. La realidad es que no existe un tratamiento específico para el VPH, pero sí para los problemas de salud relacionados como las verrugas, que pueden tratarse con medicamentos concretos o procedimientos quirúrgicos⁹. En cuanto a los problemas más graves, la detección temprana es muy importante, por lo que te recomendamos realizarte exámenes ginecológicos de forma regular.

Mucha información, ¿verdad? Tranquila. Sabemos que es un tema algo complicado, por eso queremos darte la mayor información posible. Y superimportante: no te avergüences. Es un problema por el que muchas pasamos y es bueno hablar de ello con normalidad para poder abordarlo. Desde aquí, te recomendamos que visites a tu ginecólog@ para comprobar que todo va genial y para que, en caso de no ser así, te oriente sobre qué hacer. Y no te preocupes, porque en la mayoría de los casos se puede llevar una vida totalmente normal.

Y hasta aquí todo lo que queríamos contarte sobre el VPH. Si sigues teniendo dudas o quieres ampliar información sobre cualquier tema relacionado con la salud femenina, puedes darle un vistazo a nuestra web.

PP-PF-WHC-ES-0361-1  (02/2023)